Diputado Lust reconoce que «la mitad de Cabildo Abierto son todos torturadores»
Lust defendió a un excolaborador suyo sancionado por Cabildo Abierto bajo argumento de que en ese partido hay “torturadores”
“La mitad de Cabildo Abierto fueron torturadores y están acá… ¿y a vos que estás procesado porque le pegaste una piña a una mina te van a echar?”, argumentó el diputado Eduardo Lusst que fue profesor de Derecho Público III durante muchos años en la Facultad de Derecho de la Regional Norte en Salto.
Lustt además de ser abogado constitucionalista, fue abogado del ex director del diario La República, Federico Fasano. En el año 2019 se sumó a la actividad política en Cabildo Abierto.
A continuación extraemos la nota publicada este jueves en el medio de referencia y aliado de laguardia, el Semanario Búsqueda.
A mediados de agosto de 2020, en el quinto mes del gobierno de Luis Lacalle Pou, Eduardo Lust, diputado de Cabildo Abierto, reunió en su despacho parlamentario a un grupo de colaboradores que trabajaron para él en la campaña por las elecciones parlamentarias de octubre de 2019. Su idea era hablar de temas políticos y también rearmar la agrupación que, según reconoció a los suyos, tenía “bastante desatendida” por problemas de agenda y las departamentales de setiembre, que estaban a la vuelta de la esquina.
Esa tarde, Lust tenía encima de la mesa de su escritorio una carpeta con la denuncia penal que había presentado contra el expresidente Tabaré Vázquez y su gabinete por presuntas irregularidades en la firma del contrato entre el Estado uruguayo y la empresa UPM para la inversión de la segunda planta de celulosa. Meses después, el fiscal especializado en Delitos Económicos de 1º turno, Enrique Rodríguez, archivaría esa denuncia al no verificar desviación o falta pasible de sanción penal en la conducta de los denunciados.
“UMP es mi hijo pródigo”, bromeó el legislador, que es también abogado constitucionalista, profesor grado 4 de Derecho y abanderado de causas ambientalistas, por las que se hizo públicamente conocido y captó la atención del entonces presidenciable, hoy senador y conductor de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, quien lo invitó a sumarse a sus filas. Lust también asesoró a Manini para enfrentar a la Justicia por presuntamente no haber denunciado cuando era comandante en jefe del Ejército que José Nino Gavazzo confesó ante un tribunal de honor militar que había arrojado el cuerpo del comunista Roberto Gomensoro al río Negro en 1973. Según su relato, fue él quien le sugirió al general retirado dilatar ese procesamiento “anticonstitucional” y ampararse en sus fueros parlamentarios.
Pero Lust había organizado aquella reunión con sus colaboradores para hablar del futuro político de su agrupación. Y primero quiso disculparse con algunos de sus “amigos” por haber desatendido al equipo, dijo, y citó a un par de militantes en nombre del resto: Víctor Acosta y Adrián Puppo, que hasta su llegada a Cabildo Abierto fueron los principales dirigentes del sector Cruzada Oriental, la lista 84 por la cual el abogado resultó electo diputado.
“Sos un nabo”
“Yo soy una persona agradecida, y si estoy acá (en el Parlamento) es por ustedes y por una cantidad de muchachos más que me trajeron, independientemente de que Cabildo me dio entrada y de que yo traía mis propios votos”, dijo Lust a quienes le habían dado apoyo en campaña y se disculpó por haber estado ausente en esos primeros meses de “locura” por la actividad legislativa, centrada entonces en la Ley de Urgente Consideración (LUC) y la Ley de Presupuesto, según informó Búsqueda, que había escuchado una parte de la grabación del encuentro. (Búsqueda Nº 2097)
El hecho es que casi al finalizar la reunión —en un pasaje al que no había accedido Búsqueda y hasta hoy no difundido por decisión de quien lo registró—, Lust se refirió concretamente al caso de Puppo, uno de sus colaboradores que entonces cumplía una condena por violencia de género y como medida cautelar llevaba una tobillera electrónica.
El diputado cuestionó que Cabildo Abierto suspendiera a su colaborador por causas no aclaradas y fundamentó su idea con un argumento que sorprendió a los propios militantes. “¿Qué hizo Adrián? Que no me vengan a decir que Adrián se peleó con la novia, porque eso a mí no me interesa… Yo digo ¿qué hizo en Cabildo? Si se peleó con la novia… yo me divorcié… Pero nosotros somos el (partido) de la oportunidad de la gente, (pensamos) que a la gente hay que darle una oportunidad”, empezó Lust.
Y enseguida agregó una frase que resonó en el despacho parlamentario: “La mitad de Cabildo Abierto fueron torturadores y están acá… ¿y a vos que estás procesado porque le pegaste una piña a una mina te van a echar?”.
Ahí se detuvo y a los tres segundos agregó: “No, no, mirá que yo no me como la pastilla”. Enseguida, Puppo se defendió: “No le pegué una piña”. Y entonces el diputado replicó: “Le hubieras pegado, porque te hicieron una cosa… A vos te la pusieron (por la suspensión del partido) de garrón. ¡Sos un nabo!”
Aseguró además que los partidos políticos en Uruguay “no (le) hacen a nadie proceso disciplinario: hay uno cada 10 años”. Empero, dijo que en Cabildo es moneda corriente. “¡Nosotros tenemos 20 por día…! Por eso te digo: ¡esto no es un cuartel!”, dijo.
Como sea, prometió informarse del caso. Conocía desde hacía casi un año a Acosta y a Puppo, por Cruzada Oriental, agrupación creada en marzo de 2019 y entonces presidida por Acosta. En setiembre lo sumó por la lista 84 como candidato y en octubre fue electo diputado con casi 15.000 votos. Así, se convirtió en la segunda agrupación más votada de Cabildo en la capital, solo por detrás de la de la diputada Elsa Capillera.
Lust se mostró decidido a plantarse ante las autoridades cabildantes para pedir una respuesta sobre la situación política de Acosta y Puppo. Lo veía como una forma de actuar para recuperar la confianza de sus colaboradores, porque sentía que había “quedado como un sorete” con ellos y no perdía nada con eso. ¿Quién le iba a decir que no?, razonó.
“Yo voy a pedir el expediente para ver por qué Cabildo Abierto expulsó a mi gente. Yo quiero ver la denuncia, quién los denunció y por qué”, avisó. “A mí nunca me explicaron por qué los sancionaron”, insistió.
Incluso anunció que se reuniría con el coronel retirado Eduardo Radaelli —en referencia al entonces presidente de la junta departamental de Montevideo de Cabildo y hombre de confianza de Manini— y le diría: “Mirá, estoy en desacuerdo con ustedes, todos saben qué hicieron…”.
“Lust quería interiorizarse sobre mi suspensión y la de Víctor Acosta, y dijo que iba a solicitar nuestro expediente al tribunal de disciplina de Cabildo”, contó Puppo a Búsqueda. “Yo solo había hablado con Radaelli, que me aseguró que luego de que terminara mi proceso judicial podría volver al partido”, dijo el exmilitante, que también estuvo involucrado en el caso que derivó en la renuncia del vocal del directorio de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), Enrique Montagno, en marzo de 2021. (Búsqueda Nº 2114)
Consultado en esas fechas por “el caso Montagno” en el programa Así nos va, de radio Carve, Lust dijo saber que Puppo lo había grabado a él antes que a Montagno, pero que eso le tenía sin cuidado, porque lo que decía en privado lo mantenía público. Y así se lo dijo a sus propios colaboradores previo a la reunión del 13 de agosto de 2020: “Si van a grabar (esta conversación) yo no tengo problema, porque yo lo que digo en privado lo sostengo en público”.
Lust se define como un librepensador, constitucionalista, humanista, ambientalista y católico, de formación salesiana. Al asumir su banca parlamentaria, manifestó a Búsqueda que se había sumado a Cabildo “casi sin querer”.
(Semanario Búsqueda)