Padres de niños con discapacidades que denunciaron discriminación en escuelas de Salto no recibieron soluciones
Un grupo de padres salteños cuyos hijos padecen diferentes discapacidades, entre ellos TEA o Síndrome de Down, vienen denunciado desde hace tiempo que sus pequeños sufren una sistemática discriminación en las escuelas públicas a las que asisten, ya que tanto las maestras como las directoras, les dicen que sus hijos «no deben asistir a esas escuelas porque precisan cuidados especiales», o incluso llegan a expresarles que una niña de 5 años de edad con síndrome de Down, «es enferma».
Los padres llegaron a hablar con el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, en ocasión de su visita a Salto el 20 de abril, pero hasta ahora no han tenido una respuesta favorable a su situación. Y han reclamado su derecho a tener un cuidador por el MIDES, pero desde la cartera les dicen que ese tema está demorado.
Es más, en la insistencia con sus reclamos, han logrado una reunión con la inspectora departamental de Primaria, Daniela Zabala, quien junto a una abogada de ANEP y a otras autoridades locales, los recibieron el pasado 4 de mayo, pero hasta ahora no les proporcionaron ninguna solución.
«Mi hijo tiene 5 años, tiene TEA, también va a la escuela 136 del barrio Artigas y no ha recibido ninguna solución, en la clase lo aislaban y la maestra decía que no podía integrarlo por su condición, siendo este un verdadero acto de discriminación», contó una de las madres que integra el grupo de padres con hijos discriminados en escuelas públicas a Laguardia.
Desde el MIDES, le dijeron a Josefina Núñez, que pelea por un acompañante para su hijo de 5 años con trastornos del lenguaje, que si bien sabían que ella había hablado con el presidente de la República por su situación, que «bajara un cambio», y hasta ahora siguen sin darle una solución al respecto.
También le señalaron que están atrasados en la asignación de cuidadores, ya que el método de trabajo utilizado durante la pandemia provocó un retraso en todas las gestiones.
Por el momento esos niños siguen sin poder ser atendidos por un cuidador del MIDES que los acompañe en el horario escolar, del cual se ven privados, ya que los directores de los centros escolares ordenaron a los maestros a no atenderlos, y les piden a los padres que no los manden ya que «son enfermos» y deben ir a «otro tipo de escuelas».
Por otra parte, la inspectora departamental de Educación Inicial y Primaria, Daniela Zabala que se está llevando a cabo «una intervención desde el inicio en el marco de la norma con el apoyo de los equipos de Escuelas Disfrutables, la asesoría letrada y comunicado el tema a las autoridades nacionales». Aunque aclaró que está «inhibida de hacer declaraciones».
La ley provee el derecho a niños con discapacidad de asistir a una escuela regular y recibir educación en el mismo plan que el resto de los niños que no poseen problemática alguna. Sin embargo, desde la inspección departamental no se han pronunciado al respecto de las manifestaciones de las maestras que han solicitado el retiro de esos niños de las escuelas.