Daymán está vacío y los operadores esperan con los dientes apretados
Cerradas, así estaban las puertas de las Termas del Daymán. El silencio atronador que solo interrumpía un parlante con música de casi el único comercio que estaba abierto, se hacía sentir. Adentro del parque termal solo había algunos funcionarios municipales que estaban limpiando el predio, con el fin de que el mismo se mantuviera en óptimas condiciones.
“Fue un error, un grave error que nos va a costar muy caro”, repetían los operadores de las termas del Daymán, que se han quedado sin nada, reprochando el comunicado enviado por el Ministerio de Salud el sábado a la tarde, lo que causó la estampida de turistas que estaban en el destino, quienes asustados por la posibilidad de un cierre departamental de fronteras, tomaron sus pertenencias y se largaron.
Los operadores de Daymán mandaron a sus empleados al seguro por desempleo y cerraron sus puertas. Entre tanto, los comerciantes nucleados en la Asociación de Hoteleros, Gastronómicos y Afines de Daymán (AHGA), analizan el impacto del perjuicio que está teniendo por una situación que es impensada para todos.
Desde el gobierno nacional procuran dar respuestas a esta problemática, aunque no hay mucho margen. Ahora solo resta esperar en cuarentena y ver qué sucede. Si las medidas funcionan, en alrededor de un mes, todo debe empezar de nuevo. De lo contrario, la incertidumbre será para todos.