Hombre en huelga de hambre reclamando apoyo laboral en Chapicuy
Luis Mendieta tiene 39 años de edad y hace 15 que vive en Chapicuy, una localidad del interior del departamento de Paysandú, a 90 kilómetros de la capital sanducera. Pero hace 12 días que está cumpliendo una huelga de hambre. La hace sobre la Ruta 3, en el kilómetro 453, donde instaló una precaria carpa y cartelería alusiva a su situación.
Dice que fue engañado por las autoridades departamentales y locales, que les prometieron a él y a una serie de familias que quedaron sin trabajo, apoyos para emprender y poder así salir adelante por sus propios medios.
«Pero no cumplieron con lo que nos prometieron y nos dejaron tirados, sin soluciones, no pude ni siquiera pagar más el recibo de luz de mi casa, y mi familia ya no tiene qué comer», expresó.
Mendieta, es oriundo de Montevideo pero por razones laborales y familiares se fue a vivir al interior. Se estableció en el departamento de Paysandú, en la zona de Chapicuy, una localidad más cerca de Salto que de la capital departamental, en la que todo su gobierno local pertenece al Partido Nacional, tanto el Alcalde como los cinco Concejales.
Pero la situación económica, agravada por la pandemia, dejó sin trabajo a mucha gente. Los trabajos rurales se terminaron, así como también otro tipo de tareas, por lo cual no tuvo más remedio que enfrentarse a una realidad compleja y ofrecer salidas para poder desarrollarse.
Por tal motivo, tomó contacto con las autoridades locales a las que les solicitó la ayuda necesaria para poder emprender tanto él como un grupo de vecinos que están en la misma situación, los hombres haciendo bloques para vender y las mujeres colocando un lavadero de autos sobre la ruta, con el que esperaban poder financiar sus vidas, pero nunca lograron concretarlo.
Afirmó que el intendente de Paysandú, Nicolás Olivera, estuvo con él y se comprometió a apoyar la propuesta, pero señaló que la respuesta nunca llegó.
«El motivo de la huelga de hambre es que hace por lo menos 6 meses le hemos saber a las autoridades locales y departamentales de una situación muy grave como es la falta de recursos y de trabajo, quedamos sin recursos ninguno, y afectados por las deudas que estamos teniendo, ya que estamos cada vez más hundidos, le hicimos saber a la Intendencia por medio de la Alcaldía, con quienes hubo compromisos para llevar adelante un emprendimiento que no se concretó», señaló
Dijo que las autoridades se comprometieron a comprar bloques para potenciar la actividad, pero «eso nunca se hizo, todo quedó en el debe, y la huelga de hambre que empecé hace 8 días, es para que nuestro reclamo llegue a las autoridades nacionales, para que sepan que en este pueblo que está a 90 kilómetros de la ciudad de Paysandú y estamos pasando muchas necesidades, que sepan que acá la pandemia también afectó todo, y queremos posibilidades de trabajo, para salir adelante pero trabajando».