Pusieron a Salto en la agenda nacional

Acto de Cabildo Abierto en 2021 en Pueblo Saucedo, donde el diputado Albernaz prometió gestionar una ambulancia para la zona. Manini Ríos está al lado y se lleva la mano a la cabeza. Foto cedida por militante de ese partido.

Así como Universitario nos puso en la agenda deportiva nacional por haberse convertido en los campeones del Interior 2023, los políticos salteños nos ponen un día sí y otro también en la agenda mediática nacional por mandarse macanas todos los días o por cometer acciones que son, por lo menos, cuestionables.

Primero fue el tema Salto Grande, que comenzó con una denuncia en las redes por parte del periodista Eduardo Preve, que ahora parece que es el «vocero del FAPIT (como le dicen los adversarios políticos a la unión del Frente Amplio con el PIT CNT)»; y siguió con una campaña mediática de la izquierda que terminó con la renuncia de Carlos Albisu. Aunque hasta que no pase la interpelación que será el próximo 3 de octubre, se va a seguir hablando del tema.

Después vino una nueva del «Paco», Omar Estévez, el diputado colorado que ha generado titulares por sus comentarios y acciones. Ahora, un tribunal de apelaciones en lo laboral lo condenó a la empresa de él y su esposa, pero también condenó a su hijo mayor, a pagar unos 400 mil pesos a un trabajador que le hizo reclamo laboral por trabajar «en negro» y con haberes impagos. El caso se sumó como perla a un largo collar de cuestionamientos contra el diputado y hasta ahora las cosas no están del todo claras.

Después vino el tema de la ambulancia que se trajo de Montevideo el diputado de Cabildo Abierto, Rodrigo Albernaz. Nadie sabe hasta ahora cómo un diputado entró al depósito de ASSE, se llevó una ambulancia que estaba rota, eligió un taller a su criterio para arreglarla, dejó colgados a los talleristas que dos años y medio después reclaman el pago por el trabajo realizado, se la llevó para su local partidario, luego encima la devolvió a ASSE, pero ni siquiera en el mismo estado en el que se la llevó, sino que dejó el motor en Salto en una empresa del medio, que espera que aparezca alguien a pagarles por su tarea.

Algo que parece tan absurdo como la actitud misma del legislador que encima niega haber hecho lo que hizo. «No soy fletero», llegó a decir para negar la denuncia de los empresarios. Tremendo.

Ahora hay denuncias contra una repartición y contra determinadas autoridades de la Intendencia de Salto, las que están bajo sospecha y siendo investigadas por la Policía y la Fiscalía que ha tomado cartas en el asunto, aunque hasta ahora lo único que hay es una denuncia y una serie de medidas preventivas y de acción, adoptadas por la fiscalía, lo que pone a todo el sistema político a la espera de los resultados.

A la administración, para saber si tiene que actuar de alguna manera respecto a este tema, al Frente Amplio porque quiere saber si están vacunados contra presuntos hechos de corrupción y a la oposición departamental porque después de que tuvieron que ver cómo le hacían caer a su líder y lo sacrificaron con conferencia de prensa y todo, se están fregando las manos para que, llegado el caso, sacarse cartel con alguna acción irregular que pueda surgir desde ese lugar.

Lo cierto es que todo el espectro político, todo, absolutamente todo, nos han dejado una semana llena de temas que abordar, comentar, discutir, debatir y sacar conclusiones de cara a un proceso electoral que ya se viene y se viene con todo.

Vamos a ver cuáles de todos estos hechos que están sucediendo ahora, pasarán a esa altura de las circunstancias a ser anécdotas y cuáles serán motivo de estar en las acusaciones y discusiones de una campaña que se las trae, con cruce de acusaciones, denuncias, improperios y todo lo que uno se imagine mientras vamos a estar en la primera fila, mirando.

Hugo Lemos

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