Salto recibe un 1º de Mayo con alto desempleo y sin diálogo entre el CCIS y el PIT CNT
El 1º de Mayo encuentra al departamento de Salto en uno de sus momentos históricos más delicados, con un 14,2% de desocupación, uno de los niveles más altos de desempleo que se recuerde desde la crisis del 2002. Pero hasta el momento solo se ven cruces de acusaciones, caras largas y preocupaciones, pero muy pocos aportes para buscar soluciones.
Son varios los factores que llevan a que el problema del empleo en Salto perdure y sea sostenido en el tiempo. Uno de ellos es la zafralidad, donde los trabajos a términos sobre todo en los sectores citrícolas y también en el turismo, tienen un nivel de relevancia que generan empleo alto por estacionalidades y luego bajas sustanciales, que determinan un incremento en la tasa de desempleo.
Esto refiere a un problema estructural de mas organización de esos sectores de actividad, que no se corrige durante el pasar de los años y que siguen planteando esa modalidad de trabajo.
Pero actualmente la frontera con Argentina y la diferencia cambiaria, ponen en riesgo el cierre de varios comercios y con ello, miles de fuentes de trabajo que penden de que se implementen una serie de políticas que ayuden a mitigar el impacto negativo que nos deja una histórica diferencia cambiaria.
Desde el gobierno nacional no hay medidas de alto impacto que se hayan anunciado, los comerciantes reclaman rebajas impositivas para disminuir los costos fijos y así ser más competitivos, pero hasta el momento la única medida que avizora es la rebaja de los combustibles al 40%, algo que puede llegar a ser un estímulo, pero es solamente una caricia para poder competir con una economía que cae en picada como la del vecino país y en consecuencia sus precios son inalcanzables a la hora de comparar cualquier góndola.
Mientras que desde el sector de los trabajadores tampoco se han formulado aportes ni propuestas concretas para poder encarar este problema, que es complejo, pero que sitúa al departamento como uno de los de mayor novel de desocupación del país, algo que no es bueno para nadie, ni siquiera nos deja una buena imagen.
Para peor, no hay diálogo entre el Centro Comercial y el PIT CNT, aún teniendo sus locales a pocos metros de distancia, aún siendo dos mujeres como Vera Facchín por un lado y Romina Espinosa por otro, las titulares de ambos conglomerados uno de comerciantes y el otro de trabajadores, aún estacionando Facchín su vehículo casi a diario su vehículo frente a la sede del PIT CNT por calle Sarandí casi Artigas cada vez que debe concurrir a trabajar a la gremial empresarial, ni así hay un diálogo como para unificar criterios, aportes y diferencias que ayuden a buscar soluciones en conjunto a un departamento que la está pasando mal pero muchos están disimulando.