BOSQUES URBANOS Y BIENESTAR HUMANO

Una de las cosas más lindas que me ocurre cada vez que trabajo con el tema de árboles es el sin fin de historia que rodean a muchas especies nativas o foráneas, sin dudas una de las más lindas y conocidas es la del timbó, popularmente oreja de negro, cuya historia es parte de nuestro acervo cultural.

Pero un especial cariño y predilección tengo por una especie foránea el Ginkgo biloba, el cual es el centro de mi jardín, y su historia particularmente me parece hermosa, ya que cuenta la leyenda del árbol llamado también De los cuarenta escudos, porque un rey pagó esa suma por una especie de este árbol o el tan legendario que resistió a una de las bombas de un templo de Hiroshima.

Lo cual demuestra que los arboles pertenecen a nuestra cultura a nuestro bienestar. 

Y seguiremos enumerando esas grandes ventajas que tienen nuestros amigos arbóreos.

EFECTO ENERGETICOS EN LAS CONSTRUCCIONES

La vegetación tiene un moderado efecto en las temperaturas, llegando en algunos casos a reducir una considerable energía.

Los árboles actúan como corta vientos que reducen los requerimientos de calefacción en invierno y aportan sombra en los meses de verano, reduciendo con ello el uso de los aires acondicionados. 

Heisle en 1986 estudió la reducción de entre 10-15% en invierno de los costos del uso de las calefacciones gracias a la acción rompe vientos de los árboles y, una reducción de los costos de refrigeración en los meses de verano, por el aporte de sombra y el enfriamiento a través de la evapotranspiración del 20 al 50%.

A todo esto, hay que añadir que la vegetación ayuda a mitigar el efecto de las Islas de calor. Las superficies duras y cristalinas de las edificaciones reflejan la radiación solar, devolviéndola a la atmósfera en forma de energía. La vegetación absorbe esta energía y usa el 80% de ella para su subsistencia y para la creación de biomasa. Solo el 20% de la energía solar es reflejada de la vegetación y devuelta a la atmosfera.

De este modo podemos decir, que el calor radiado de las edificaciones, industrias y emisiones vehiculares aumentan los niveles de polución en el aire de la ciudad, aumentando las temperaturas 8°C más altas que en áreas rurales.

EL ARBOLADO REDUCE LA POLUCION ACUSTICA

Distintas pruebas en terreno han demostrado que las plantaciones de árboles y arbustos diseñados apropiadamente pueden reducir de manera significativa el ruido. Las hojas y ramas reducen el sonido transmitido, principalmente dispersándolo, mientras el suelo lo absorbe. Para la reducción óptima del ruido, los árboles y arbustos deberían ser plantados cerca del origen del ruido y no cerca del área receptora.

La efectividad de la vegetación para controlar ruidos está determinada por el sonido mismo, la configuración de la plantación arbórea y las condiciones climáticas.

AUMENTO DE LA BIODIVERSIDAD

BIODIVERSIDAD: “es la variabilidad de organismos vivos de cualquier fuente incluidos, entre otras cosas, los ecosistemas terrestres, marinos y otros ecosistemas acuáticos y los complejos ecológicos de los que forman parte, comprende la diversidad dentro de cada especie, entre las especies y de los ecosistemas”.

Al menos 1.750.000 especies de seres vivos, conforman el stock de diversidad genética con que cuenta el planeta.

Un buen ejemplo lo constituyen las plantas medicinales. Estimadas entre 25.000 y 75.000 especies, muchas de ellas son medicinas tradicionales. Sin embargo, la posibilidad de seguir utilizando este recurso está siendo amenazada por el avance de un modelo de desarrollo que provoca la extinción de miles de especies, la desaparición de espacios naturales, la pérdida de conocimientos tradicionales.

Las ciudades modernas afectan fuertemente su entorno natural y la biodiversidad de sus áreas vecinas, agotando muchos recursos para abastecerse de alimentos, materiales y energía; depositando sus residuos sólidos y vertiendo sus aguas contaminadas en áreas agrícolas o naturales. La “huella urbana” o “huella ecológica” contribuye significativamente a la perdida de la biodiversidad.

En el Reino Unido los jardines domésticos tienen un potencial importante en el soporte de la biodiversidad urbana, ya que abarcan más del 60% del área urbana en las zonas residenciales.

Por ejemplo, el simple hecho de la presencia de pájaros en nuestro ambiente es un elemento vital en el contexto de la recreación.  

SALUD MENTAL Y FISICA

La disminución de la presión (estrés) y el mejoramiento de la salud física de los residentes urbanos han estado asociados con la presencia de árboles y otra vegetación, producen estados fisiológicos más distendidos en los humanos que los paisajes que carecen de estas características naturales.

Los ambientes de bosque urbanos proveen entornos estéticos, aumentan la satisfacción de la vida diaria y dan un mayor sentido, de relación significativa, entre la gente y el medio natural. Los arboles están entre las características más importantes al contribuir a la calidad estética de las calles residenciales y parques comunitarios.

Los árboles y bosques urbanos proveen experiencias emocionales y espirituales significativas que son extremadamente importantes en la vida de la gente y pueden conducir a un fuerte arraigo a lugares particulares y a los árboles.

Ya sea desde una ventana de una oficina, la naturaleza cercana puede proporcionar beneficios psicológicos sustanciales, afectando la satisfacción del trabajo y el bienestar.

Está demostrado que las experiencias en los parques urbanos ayudan a cambiar estados de ánimos y a reducir la presión. También la sombra reduce la radiación ultravioleta y de esa manera puede ayudar a reducir los problemas de salud (cataratas, cáncer de piel, irritaciones, etc.) asociados con el incremento en la exposición a la radiación ultravioleta.

Ya que no podemos negar todas las ventajas que tienen los bosques urbanos cuál debería ser nuestra participación en la mejora o la creación de éstos espacios tan importantes.

Primero y muy importante exigir a nuestras autoridades y gestores de nuestras ciudades y de los espacios urbanos la creación armónica de bosque urbanos como modo de mejorar nuestro estilo de vida, tratando de proporcionar un medio ambiente más sano y habitable.

Lo ideal sería que cada uno de nosotros y en las medidas de nuestras posibilidades y para mejorar la biodiversidad poder plantar un árbol, arbusto o instalar pequeños jardines.

Si nuestra posibilidad no nos permite incorporar nuevas especies de árboles o arbustos sería importante nuestra participación en el cuidado de los ya existente tanto bosques urbanos como árboles del ornato público.

Tanto exigiendo su cuidado como respetando su espacio, como épocas de poda y floración, asegurándonos entre todos, ciudades más amigables con el medio ambiente y nuestra salud.

ANGELINA MANZINI DE SOUSA

Técnico Forestal

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