El Covid copa la agenda, el dólar por las nubes y el costo de vida es cada vez más alto

Mientras el interés de la opinión pública transcurre por el carril de la salud y la situación del coronavirus nos afecta sobremanera, hay un tema que parece no estar en la agenda pública, aunque sí está más presente que nunca en el bolsillo de los uruguayos.

Se trata del aumento sustancial del precio del dólar en las últimas semanas, que llegó a un pico histórico de 45,75 pesos. Esta situación trae aparejada costos para la población ya que genera una inevitable inflación, esto un aumento de precios en los costos operativos que se traslada al consumidor final y por ende, un encarecimiento del costo de vida.

Más allá de que el porcentaje de incremento esté controlado por la autoridad monetaria, la situación se vuelve compleja porque el aumento de los precios en función del incremento de la divisa norteamericana que es la que rige todos los costos de producción y del transporte de mercadería, hace que por un lado los precios suban y que por otro los ingresos se mantengan, lo que termina generando un desfasaje entre el valor de la mercadería y el poder de compra.

Esta situación determina un aumento de la pobreza en varios sectores de la sociedad que dependen de manera exclusiva de la mano del Estado, de la ayuda social y de los planes que tiene para este sector de la población el Ministerio de Desarrollo Social.    

En los últimos años la pobreza fue aumentando de manera estructural de forma paulatina, algo que se aceleró con la llegada del coronavirus y el estancamiento de la economía, promovido por las medidas sanitarias que determinaron un confinamiento que únicamente no afectó a quienes reciben salarios por encima de la media de manera mensual y segura, pero que sí perjudicó a la gran mayoría de la población.

En medio de esta situación, una franja del sector productivo, específicamente el sector ganadero y agrícola, se ven beneficiados con el aumento del dólar porque recuperan competitividad para la colocación de productos y commodities, sin embargo, la gran mayoría de la población ve enlentecida su posibilidad de desarrollo. 

Mientras la economía se estanca, el dólar sube y el encarecimiento de vida aparece como algo que llegó para quedarse y afectar a la mayor parte de la población, el coronavirus gana prácticamente toda la agenda del gobierno y las soluciones para los efectos sociales que genera en parte esta pandemia, están cada vez más lejos.

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