Semana difícil para operadores termales y comerciantes de Salto por cruce hacia Argentina
El que terminó fue un fin de semana complicado en materia de turismo y comercio para Salto. Uno de los departamentos del litoral más afectados por la diferencia cambiaria con Argentina y que ha venido registrando uno de los mayores índices de desempleo en lo que va de este Siglo.
Salto cuenta con un registro oficial del 13,8 por ciento de desocupación, sin embargo, fuentes sindicales y políticas aseguran que los guarismo reales están por encima de ese dato y que además hay que adicionar un nivel de informalidad que es alto, máxime teniendo en cuenta la situación a la vista de este flagelo como es el imponente centro de compras de productos de contrabando, denominado bagashopping.
En materia hotelera los operadores de Daymán que hablaron con laguardia, contaron que están atravesando por una situación altamente compleja en función de la escasez de reservas que han tenido en los últimos tiempos en sus distintos hoteles.
«Encima no hay perspectivas positivas para la semana entrante, porque no tenemos buenos niveles de reservas como pasaba antes. Otros años a esta altura del año siempre teníamos muchos turistas visitando los centros termales y las reservas eran positivas, pero desde hace algunos años que no pasa eso y este año ha sido de los peores que hemos tenido», recordaron desde la Asociación de Hoteleros, Gastronómicos y Afines de Daymán (AHGA).
Por su parte, el parque termal municipal ha contado con un nivel de venta de entradas que ha sido «muy flojo y de las 2 mil entradas que se vendían antes durante un solo día del fin de semana, ahora se venden apenas 500 o menos y eso nos genera preocupación y angustia», sostienen algunos de los operadores consultados al respecto.
Incluso el pasaje de uruguayos hacia la República Argentina durante el fin de semana ha sido uno de los más altos desde la reapertura de las fronteras con aquel país, en el escenario post pandemia. En el puente de Salto Grande hubo largas filas de vehículos desde el olado uruguayo durante todo el fin de semana y desde el pasado viernes, lo que repercutió de manera negativa en el turismo y en el comercio local, ya que hubo cientos de personas que dejaron de estar en Salto o de venir al departamento para irse al otro lado del río.
La preocupación crece porque tampoco hay medidas de parte de los gobiernos nacional y departamental que coadyuven a mitigar el impacto negativo que se está viviendo y mientras los operadores termales y los comerciantes salteños se miran entre ellos, los consumidores siguen optando por cruzar la frontera.