Impulsores de barrios privados creen haber derribado la «resistencia ideológica» del gobierno departamental para concretar sus proyectos
Luego que varios empresarios locales y otros del sur del país formularan un pedido especial a la Intendencia de Salto, con la finalidad de contemplar sus propuestas de poder construir barrios privados, donde apuestan a un desarrollo urbanístico y habitacional distinto al que estábamos acostumbrados hasta ahora, el jefe comunal salteño, Andrés Lima, anunció que la administración recibió hasta ahora tres solicitudes para desarrollar este tipo de residenciales en la capital departamental.
La particularidad es que todos estarían ubicados al norte de la ciudad. El primero se emplazaría en las avenidas Garibaldi y Saturnino Ribes, el segundo en la avenida Ramón J. Vinci (ex Apolón) y Camino del Éxodo, mientras que el tercero se construiría en la avenida Saturnino Ribes al norte de la avenida Ramón J. Vinci, en las inmediaciones de la planta potabilizadora de OSE.
Andrés Lima agregó que las propuestas fueron presentadas por empresas y empresarios locales y que «es de gran interés para su administración avanzar en aspectos relacionados al marco normativo necesario para autorizar la ejecución de estos proyectos», los que según dijo «promueven trabajo, desarrollo e inversión».
«Para ello, durante los próximos sesenta días un equipo de técnicos trabajará en la elaboración de un proyecto que establecerá las condiciones que permitan remitirlo a la Junta Departamental de Salto, durante el mes de agosto y que los ediles resuelvan», expresó el intendente.
También señaló que «una de las prioridades para el Gobierno Departamental es fomentar más y mejores inversiones en el departamento, brindando todas las garantías para los inversores así como para la población, respetando la normativa departamental y elevando al órgano legislativo las consultas y propuestas necesarias para avanzar en la generación de inversión».
Los empresarios locales que apuestan a la conformación de barrios privados, pudieron «derribar la resistencia ideológica», la que, según admitieron algunos de ellos a laguardia, en principio entendieron que existía en el gobierno de Salto.
Por lo cual, dijeron que «celebraron la posibilidad de poder comenzar» este tipo de construcciones, afirmando que con las mismas «vamos a dar trabajo a mucha gente».